El chorro de agua no puede causar daños visibles.
Los componentes dañados pueden averiarse de manera inesperada.
No utilice en ningún caso un aparato de limpieza a alta presión en el habitáculo ya que mediante la cantidad de agua a presión generada por el aparato de limpieza a alta presión y el pulverizador unido a él podría dañar el vehículo de forma considerable.
Mantenga una distancia mínima de 30 cm respecto al vehículo y tenga en cuenta los datos en el manual de instrucciones del fabricante del aparato.
Mueva continuamente el chorro de agua del aparato de limpieza a alta presión durante la limpieza.
No dirija el difusor del aparato de limpieza a alta presión directamente a piezas sensibles tales como neumáticos, ranuras, componentes eléctricos, baterías, bombillas y aberturas de ventilación.