Si deja animales sin vigilancia o sueltos en el vehículo pueden pulsar por ejemplo teclas o interruptores.
activar equipamientos del vehículo y, por ejemplo, quedar atrapados.
encender‑ o apagar sistema y, como consecuencia, poner en peligro otros usuarios de la vía.
Además los animales sueltos puede moverse en caso de accidente o maniobra abrupta de giro o de frenado en el vehículo y como consecuencia dañar a otros ocupantes del vehículo.