Si acopla una marcha descendente al circular sobre una calzada resbaladiza para incrementar el efecto de frenado del motor, las ruedas propulsoras pueden perder la adherencia.
Si deja reposar el pie sobre el pedal de freno durante la marcha, el sistema de frenos se puede sobrecalentar.
Con ello, la distancia de frenado se prolonga y el sistema de frenos podría incluso fallar.
En caso de cambio automático, acople manualmente de manera anticipada una marcha inferior para que el motor gire en el margen de número de revoluciones medio hasta superior Más.
En caso de cambio manual, acople anticipadamente una marcha inferior para que el motor gire en el margen de número de revoluciones medio - superior.
Si el TEMPOMAT está conectado o el limitador de velocidad está conectado, cambie anticipadamente la gama de marchas. Tenga en cuenta las indicaciones para la marcha Más.
De esta forma aprovechará el efecto de frenado del motor para mantener la velocidad y deberá frenar menos. Además, se reduce el esfuerzo que debe soportar el freno de servicio y evita el sobrecalentamiento y el desgaste más rápido de los frenos.
Si ha sometido al sistema de frenos a elevados esfuerzos, no estacione el vehículo de inmediato. Siga circulando un breve periodo de tiempo. Los frenos se refrigerarán con mayor rapidez gracias al viento producido por la marcha del vehículo.
Si utiliza los frenos con poca frecuencia, frene de vez en cuando el vehículo para verificar la eficacia del sistema de frenos. Para ello, frene con determinación cuando circule a una velocidad elevada, siempre teniendo en cuenta el tráfico. De esta forma, se incrementa la efectividad de los frenos.
Si circula durante mucho tiempo bajo lluvia intensa sin frenar, puede que los frenos respondan con retardo al frenar por primera vez. Este comportamiento también puede aparecer después de lavar el vehículo o de atravesar agua profunda. En dicho caso, deberá pisar con más fuerza el pedal de freno. Mantenga una mayor distancia con respecto al vehículo precedente.
Después de circular por una calzada mojada o de lavar el vehículo, frene el vehículo con determinación teniendo en cuenta la situación del tráfico. De esta forma se calientan los discos de freno, se secan más rápidamente y quedan protegidos contra la corrosión.
Con una capa de sal sobre los discos de freno y los forros de freno la distancia de frenado puede incrementar considerablemente o puede ajustarse a un frenado unilateral.
Mantenga una distancia de seguridad especialmente grande con respecto al vehículo que le precede.
Frene de forma ocasional teniendo en cuenta la situación del tráfico.
Pise el pedal de freno con cuidado al final del trayecto y en una reanudación de la marcha.
Los forros y discos de freno nuevos alcanzan un efecto de frenado óptimo después de haber recorrido unos
Compense el efecto de frenado reducido aplicando una mayor presión sobre el pedal de freno. Por motivos de seguridad, Mercedes-Benz le recomienda encargar en su vehículo exclusivamente el montaje de los discos de freno y los forros de freno homologados por Mercedes-Benz .
Si se instalan discos de freno o forros de freno diferentes, la seguridad del vehículo puede verse afectada.
Sustituya siempre los discos de freno y los forros de freno por ejes. Al sustituir los discos de freno, utilice siempre forros de freno nuevos.
Si debe frenar el vehículo con el freno de estacionamiento, la distancia de frenado es considerablemente mayor y las ruedas se pueden bloquear. Se incrementa el peligro de derrape y de accidente.
Si conduce sobre calzadas mojadas o superficies cubiertas de suciedad, puede introducirse sal de la calzada o suciedad en el freno de estacionamiento. Esto puede provocar corrosión y una disminución de la fuerza de frenado.
Para evitarlo, circule de vez en cuando con el freno de estacionamiento ligeramente aplicado.
Para ello, recorra una distancia de aproximadamente
Si frena el vehículo con el freno de estacionamiento, no se encienden las luces de freno.